El caso de Rocío
Rocío tiene decidido cortar con su novio. Según ella, Luis no la quería, no la trataba como se merecía y estaba harta de esperar a que cambiase. Después me acordé y me di cuenta que este chico en cuestión es el mismo que la llevaba de viaje cada pocos meses a pesar de que ganaba poco dinero, le ayudaba con tareas de la universidad que no podía superar ni el nerd de su clase, y no se olvidaba nunca del aniversario o su cumpleaños. Ni siquiera del cumpleaños del perro.
¿Cuál era el defecto imperdonable de este chico? Nunca le decía que la quería. Y como no se lo decía, ella pensaba que no la valoraba lo suficiente. Ya está.
El caso de Juan
Juan se quejaba de que su novia sólo sabía decirle que le quería mucho. O que casi podría escribir un libro con las cientos de frases super dulces, empalagosas, edulcoradas, y sobreazucaradas que se le ocurren decirle. Eso sí. No mueve un dedo por él. Y él valora los detalles.
En el ámbito de la vida en pareja, siempre nos quejamos de problemas de todo tipo. Algunos son más visibles; como discutir constantemente, las manías de unos y de otros, la falta o el exceso de sexo… Y otros pasan más desapercibidos. Puede que en una pareja haya mucho amor y cariño y sin embargo no lo perciban porque lo expresan en un lenguaje diferente.
Muchas veces nos quejamos de que no recibimos muestras de amor por parte de nuestra pareja. A lo mejor, es que nos encabezonamos en que sólo podemos recibir amor de una forma concreta, la que a nosotros nos gustaría. Pero ignoramos el esfuerzo que hace por nosotros esa otra persona. Cada uno se expresa de una manera distinta.
No sentirse amado en una relación de pareja puede llegar a ser muy frustrante y decepcionante. Genera inseguridad, la cual al principio es mitigada por la comprensión y la empatía, pero más tarde o más temprano, promueve que las diferencias se vuelvan océanos imposibles de recorrer, las críticas y los ataques aparecen en discusiones y las peticiones se convierten en demandas que satisfacemos por culpa, miedo u obligación.
Cada persona expresa, siente, entiende, da y recibe amor de diferentes maneras. De la misma forma que en los idiomas, el amor tiene diferentes lenguajes, y si tu pareja no se siente amada, posiblemente estés trasmitiendo en el idioma equivocado.
Sentirnos amados es una necesidad vital para nuestro bienestar, de hecho es una de nuestras necesidades básicas, y cuando en el marco de las relaciones esto deja de darse, el alejamiento es cada vez más notable.
Si tu hablas un idioma y tu pareja habla otro, no habrá forma de entenderos y vuestros tanques de amor estarán vacíos, es decir, no os sentiréis queridos. Es entonces cuando aparecen las inseguridades, los reproches y un sin fín de discusiones que lo único que hacen es acabar mermando la estabilidad de la relación.
Si quieres evitar que esto ocurra, la clave es aprender el idioma de la otra persona.
El Doctor Gary Chapman y sus 5 Lenguajes del Amor
El Doctor Gary Chapman distingue 5 lenguajes del amor (1995) en su obra del mismo nombre. O mejor dicho, 5 formas generales de expresar el amor. Ya sea a nuestra pareja, que será donde más nos fijemos, pero también a amigos, a familiares… en definitiva, a todo nuestro círculo de personas cercanas. Estos lenguajes los expresamos con:
1. Hablando
Verbalizamos el amor hablando. Decimos te quiero, recitamos poesía, decimos cosas que ponen en entredicho nuestra integridad a veces… O lo expresamos con palabras de ánimo, de apoyo, de agradecimiento. Las palabras son valiosas. Todo aquello que tiene un nombre, forma parte de nuestra realidad.
Y nuestra intención cambia hacia la gente cuando nos dirigimos a ellas de una manera o de otra. Valora bien tus expresiones, y también las expresiones de tu pareja.
Este es el lenguaje de las personas que necesitan de las palabras para sentirse queridas.
Si este es el lenguaje de amor principal de tu pareja, es muy posible que te pida el reconocimiento de sus acciones, de sus esfuerzos, de sus éxitos y de sus virtudes. Afirmar a tu pareja con palabras y darle el aprecio que necesita.
Utilizar este lenguaje también es saber dar los ánimos necesarios en el momento en que nuestra pareja necesita un empujón para salir de sus miedos y poder alcanzar sus propósitos.
Para poder hacerlo es importante empatizar con ella y ver el mundo a través de sus ojos. Los ánimos no son para que haga lo que nosotros queremos, es para darle el valor que le falta para alcanzar sus sueños.
¿Cómo aprender este lenguaje? Si no eres una persona de palabras, puedes empezar con pequeñas prácticas. Escuchar las solicitudes de tu pareja te puede ayudar a saber qué es exactamente lo que necesita. Poco a poco, y enseguida podrás ver el cambio de actitud de la persona que quieres, lo cual te animará a seguir aprendiendo. Al final, con la práctica encontrarás un espacio de comodidad para seguir expresando en palabras.
2. Tiempo de calidad
A lo mejor ese chico o esa chica especial, no es muy hablador que digamos. Pero sí sabe escuchar, y se toma su tiempo para ello.
Las palabras son su punto débil, pero sabe manejar mejor que nadie el tiempo que te dedica a ti exclusivamente. El tiempo que pasamos con los demás está muy infravalorado. Hay chicas que valoran más que el chico las invite a cenar en lugar de que el restaurante sea caro o no. Porque eso significa que prefiere pasar tiempo contigo en vez de dedicarlo a otras cosas.
El valor de una persona también se refleja en cómo reparte su tiempo. Y encontrar un hueco para esas personas es una muestra de que son importantes para ti. Una página en tu agenda puede ser una demostración sincera de amor.
Dar nuestro tiempo y atención completa es un poderoso comunicador de amor. Y con completa me refiero a prestar toda tu atención, sin móviles, sin ordenadores, sin televisión, sin prensa.. sin nada más que pueda distraerte. Lo importante es la persona que tienes delante, la persona que estas escuchando y así se lo demuestras dedicándole todo tu tiempo.
El tiempo de calidad puede ser hacer alguna actividad conjuntamente con un propósito común, disfrutando el uno del otro, como también espacios para conversaciones donde comunicar experiencias, pensamientos, sentimientos y deseos.
Esto implica expresar quién eres para generar intimidad. Si desconoces lo que tu pareja siente o piensa, dejas de conocerla, y no se puede estar emocionalmente cerca de alguien que no conoces. Es un muro invisible que desplaza la seguridad emocional que ofrece el sentirse amado o amada.
Hay personas que llevan tanto tiempo desconectadas de sus sentimientos que hasta les cuesta reconocerlos. Si este es tu caso, el primer paso para aprender este lenguaje es aceptar que todos somos seres emocionales y que la educación y las experiencias de la vida han favorecido esta desconexión en ti.
Practica el adentrarte en tu mundo interior, prestar atención a lo se mueve dentro de ti, a las señales que va dando tu cuerpo, para volverte a conectar poco a poco con tus sentimientos y emociones.
3. Regalos
Los regalos son muy traicioneros. Podemos llegar a juzgar el cariño de esa persona en base al regalo que le hacemos. Y muchos lo piensan e intentan “comprar” el amor de esa persona especial a base de regalos caros sin que vengan a cuento.
Quitando todo eso, el regalo representa que: primero, has estado dedicando tiempo a buscarlo, y durante ese tiempo has tenido a esa persona en mente. Y segundo, has sacrificado parte de tus recursos o tu tiempo para que esa otra persona tenga ese detalle.
Aunque el poder real del regalo radica en el factor sorpresa. No importa lo caro o la cantidad. Lo que importa es el momento y cómo lo recibe.
La actitud del amor siempre va acompañada con el dar.
Es indiferente si son comprados, encontrados o hechos a mano, lo importante es que la otra persona ha estado pensando en ti, en lo que te puede gustar y te puede hacer feliz. El regalo es solo un símbolo de esos pensamientos.
Aún así, el regalo más preciado es el regalo de uno mismo. Estar en los momentos en que tu pareja te necesita o son importantes para ella. Este es uno de los lenguajes más fáciles de aprender.
4. Actos de servicio
Cuando hablamos de servicios, nos referimos a hacer cosas por el otro. Como cocinar, limpiar, arreglar cosas, hacer desplazamientos largos… Son cosas que hacemos sin esperar nada a cambio. Sólo porque sabemos que nuestra pareja será feliz con ello. Sí, sé lo que estáis pensando. Es muy bonito el altruismo, pero también es una forma muy sencilla aprovecharse de los demás. ¿verdad?
Puede ser. Pero recordad que lo que gratis se te da, gratis se te quita. Así que no lloréis cuando en el futuro os veáis privados de esos servicios por no saberlos agradecer como es debido.
Es importante insistir que estos actos se hacen libremente. Se decide hacerlos por amor para demostrarle a la otra persona que la quieres, no por miedo, ni manipulación, ni culpa. Y siempre respetándote, en caso contrario estaríamos hablando de un amor tóxico e insano.
Es posible que tengas que romper con creencias o estereotipos que te obstaculizan el camino del aprendizaje de más lenguajes del amor que no sean el tuyo. Si aún así decides continuar en el camino, además de hacer que tu pareja se sienta querida, estarás recorriendo un camino de crecimiento y desarrollo personal.
5. Contacto físico
Es muy raro concebir una relación amorosa formal si tocas a la otra persona como si fuera un puercoespín. Ni tampoco tendrás una buena respuesta si esa mano va primero a partes del cuerpo más “privadas”, antes que una caricia en una mejilla, por ejemplo. Hemos dicho que las palabras son importantes, pero el tacto también transmite mensajes. Maneja tu lenguaje corporal. Utiliza tu tacto con más “tacto”.
El contacto físico es un gran comunicador de amor. De hecho, diversas investigaciones han llegado a la conclusión que los niños y niñas que han sido besados y abrazados en su infancia, desarrollan una vida emocional más saludable.
En la edad adulta, también necesitamos de este contacto para generar intimidad y acercamiento. Puede ser ir cogidos de la mano, besarse, abrazarse, tener relaciones sexuales…
¿Sólo puedo expresar un tipo de amor?
Y estas son las cinco formas de expresar el amor según Chapman. Aunque lo interesante de todo esto, no es el autoclasificarte en un estilo u otro y ya está. Todos estamos capacitados para expresarnos de las 5 maneras. Así que, como conclusión a este artículo, podemos repasar 4 verdades sobre la expresión del amor:
- Cada uno expresa su amor y cariño de una manera particular.
- No siempre recibimos amor de la forma que nos gustaría. Al igual que no siempre acertamos a la hora de expresarnos. Aún así, no significa que no recibamos o dejemos de dar amor.
- Todos estamos capacitados para expresarnos en todos los lenguajes disponibles. Es cuestión de ir explorándolos.
- No todo el mundo nace sabiendo. Si hay algo que no te gusta, no temas a decirlo. Y si hay algo que sí te gustaría que hiciesen por ti, también puedes decirlo.
Muchas veces, el error está en que obviamos los pensamientos del otro. Y nadie está capacitado para leer el pensamiento de nadie. Parece de cajón. Pero creedme. Muchas parejas rompen por no saber gestionar cosas tan sencillas como esta. Así que ya sabéis, seguid desarrollando vuestro lenguaje.
No es algo que se aprenda en un día, pero la dedicación y la práctica conllevan sus frutos, con el tiempo te sentirás más cómoda o cómodo con la expresión de otro idioma afectivo, tu pareja y tu relación te lo agradecerán.
Si quieres acertarte emocionalmente a alguien y/o mejorar tu vida de pareja, éste es uno de los caminos más efectivos.
Ahora que ya conoces los cinco lenguajes del amor, te será más sencillo identificar cual es el tuyo y cual el de tu pareja.